Un mioma submucoso es un tipo de tumor benigno que se forma en el útero y que crece justo debajo de la capa interna del revestimiento uterino, llamada endometrio.
Aunque no es canceroso, puede causar diversos síntomas y problemas de salud, especialmente relacionados con el ciclo menstrual y la fertilidad.
Tabla de contenido
¿Qué es un mioma submucoso?
Los miomas uterinos, también conocidos como fibromas, son tumores benignos que se desarrollan en el tejido muscular del útero.
Existen diferentes tipos de miomas dependiendo de dónde se localizan, y el mioma submucoso es el que crece hacia la cavidad uterina, bajo la capa mucosa que recubre el útero.
El mioma submucoso tiende a provocar síntomas más severos que otros tipos de miomas debido a su ubicación, que puede afectar el ciclo menstrual y el revestimiento del útero, lo que genera problemas de fertilidad o sangrados abundantes.
Causas del mioma submucoso
Aún no se conoce con exactitud la causa de los miomas submucosos, pero se cree que están relacionados con varios factores:
- Hormonas: Las hormonas estrógeno y progesterona, que regulan el ciclo menstrual, también parecen influir en el crecimiento de los miomas. Es por eso que los miomas suelen crecer durante los años reproductivos y disminuir tras la menopausia.
- Genética: La predisposición genética tiene un papel importante en el desarrollo de miomas. Si hay antecedentes familiares de miomas, el riesgo de desarrollarlos es mayor.
- Factores de crecimiento: Existen sustancias en el cuerpo, como los factores de crecimiento, que podrían favorecer el desarrollo de los miomas al estimular la proliferación de las células musculares del útero.
- Inflamación y estrés: Se ha sugerido que la inflamación crónica o el estrés oxidativo en el cuerpo podrían contribuir al desarrollo de miomas submucosos, aunque esta relación aún está en estudio.
Síntomas del mioma submucoso
Los síntomas de los miomas submucosos pueden variar según el tamaño y la ubicación del tumor, pero en general, este tipo de mioma está más asociado con síntomas intensos debido a su proximidad con el revestimiento interno del útero.
Los síntomas más comunes incluyen:
- Sangrado menstrual abundante: Los miomas submucosos suelen causar menstruaciones muy abundantes y prolongadas (menorragia), que pueden llevar a una anemia por la pérdida excesiva de sangre.
- Sangrado entre periodos: Además de los periodos menstruales abundantes, las mujeres con miomas submucosos pueden experimentar sangrado intermenstrual, lo que puede ser incómodo y debilitante.
- Dolor pélvico o presión: Los miomas de mayor tamaño pueden causar una sensación de presión o dolor en la pelvis, sobre todo si el mioma comprime otros órganos cercanos.
- Infertilidad o abortos espontáneos: Los miomas submucosos pueden interferir con la implantación del embrión o el desarrollo adecuado del embarazo, lo que puede dificultar quedar embarazada o aumentar el riesgo de aborto espontáneo.
- Dolor durante las relaciones sexuales: En algunos casos, la presencia de miomas submucosos puede causar dispareunia (dolor durante el coito), debido a su ubicación en el útero.
- Problemas urinarios o intestinales: En los casos en los que el mioma submucoso crece demasiado, puede presionar la vejiga o el intestino, lo que causa dificultad para orinar o estreñimiento.
Diagnóstico del mioma submucoso
El diagnóstico de un mioma submucoso comienza con un examen ginecológico y una serie de pruebas de imagen para confirmar la presencia y ubicación del mioma.
Algunas de las pruebas más utilizadas son:
- Ecografía transvaginal: Es la técnica más común y no invasiva para visualizar los miomas dentro del útero. Permite ver claramente los miomas submucosos y su ubicación en la cavidad uterina.
- Histeroscopia: Este procedimiento utiliza un pequeño tubo con una cámara que se introduce a través de la vagina para observar directamente el interior del útero. Es útil para confirmar el diagnóstico y, en algunos casos, permite realizar tratamientos durante el mismo procedimiento.
- Resonancia magnética (RM): En algunos casos más complejos, la resonancia magnética proporciona imágenes detalladas del útero y permite identificar con precisión el tamaño y la ubicación de los miomas.
- Sonohisterografía: Esta técnica implica la introducción de solución salina en el útero para mejorar las imágenes por ultrasonido, lo que permite una mejor visualización de los miomas submucosos.
Tratamiento para los miomas submucosos
El tratamiento del mioma submucoso depende de varios factores, como el tamaño del tumor, la gravedad de los síntomas y si la paciente desea conservar su fertilidad.
Aquí te explicamos algunas de las opciones de tratamiento más comunes:
1. Medicamentos
Los medicamentos pueden ayudar a reducir los síntomas, aunque no eliminan los miomas por completo. Algunas opciones incluyen:
- Anticonceptivos hormonales: Ayudan a regular el ciclo menstrual y reducir el sangrado.
- Agonistas de la GnRH: Disminuyen los niveles de estrógeno y progesterona, lo que puede reducir temporalmente el tamaño de los miomas y mejorar los síntomas.
- Antiinflamatorios no esteroideos (AINEs): Se utilizan para aliviar el dolor.
2. Procedimientos mínimamente invasivos
Si los miomas submucosos causan síntomas severos o problemas de fertilidad, se pueden realizar procedimientos quirúrgicos para eliminarlos sin necesidad de una cirugía mayor:
- Histeroscopia quirúrgica: Este procedimiento permite extirpar los miomas submucosos utilizando un histeroscopio. Es una opción efectiva para mujeres que desean preservar su útero y su fertilidad.
- Ablación endometrial: En algunos casos, se destruye el revestimiento del útero para controlar el sangrado, pero este procedimiento no es adecuado para mujeres que deseen quedar embarazadas en el futuro.
3. Cirugía
En casos más graves o cuando los miomas son muy grandes, puede ser necesario recurrir a una cirugía más invasiva:
- Miomectomía: Es la cirugía para extirpar los miomas manteniendo el útero intacto, lo que la convierte en una opción para mujeres que desean preservar su fertilidad.
- Histerectomía: Es la extirpación completa del útero y se recomienda solo en casos graves o cuando la paciente no desea tener más hijos.
¿Cuándo buscar atención médica?
Si experimentas síntomas como sangrado menstrual excesivo, dolor pélvico persistente o tienes problemas para quedar embarazada, es importante que busques atención médica.
El diagnóstico y tratamiento tempranos pueden ayudarte a mejorar tu calidad de vida y evitar complicaciones a largo plazo.
El mioma submucoso es un tipo de mioma uterino que se desarrolla bajo el revestimiento interno del útero.
Aunque no es canceroso, puede causar síntomas molestos como sangrado abundante y dolor pélvico, además de afectar la fertilidad en algunos casos.
Por suerte, existen varias opciones de tratamiento que pueden ayudar a controlar los síntomas y mejorar la salud reproductiva.
